El Despertar de los Héroes: citas

Aviso: este post contiene una selcción de citas de 'El Despertar de los Héroes', equivalente a la edición moderna de 'La Gran Cacería' y 'La Batalla de Falme', por lo tanto, algunas pueden contener spoilers de la trama.

(Imágen de Kurosaki7)

 -Yo, por mi parte, he estado recibiendo clases de Moraine, de forma que, si no te avienes a razones Rand al'Thor, podría prenderte fuego en los pantalones. (Amenazas de Egwene, 100% efectivas.)

-Bien, la espada que no se quebraba se hizo añicos al final, pastor, pero luchó contra la Sombra hasta el último aliento. Hay una norma, superior a las otras, que debe regir la vida de un hombre. Sean cuales sean las adversidades, afróntalas con la cabeza bien alta. (Consejo de Lan a Rand).

-Puede que sea un estúpido, pero tengo intención de ser un estúpido vivo. Mira, ya sé que viniste para ayudarme  te estoy agradecido. De veras. Pero ya no eres el mismo de antes. Lo comprendes, ¿verdad? (Mat a Rand, tras averiguar que puede encauzar el poder)

-Como desees. ¿He mencionado que las novicias realizan trabajos? Lavan platos, friegan suelos, hacen la colada, sirven la mesa, todo tipo de tareas. Por una parte yo creo que las criadas lo hacen mucho mejor, pero de todos es sabido que tales favores refuerzan el carácter. Oh. ¿Vas a quedarte? Estupendo. (Verin Sedai, “convenciendo a Nynaeve de que no se salte sus clases)

-Algunos hombres deciden ir en pos de la grandeza, mientras que otros se ven forzados a aceptarla. Siempre es mejor elegir que cumplir una obligación. El hombre que actúa bajo presión, nunca llega a dominar la situación. Debe danzar al compás de las cuerdas que accionan quienes lo han inducido. (Selene a Rand)

-Estoy aquí porque me mandaron llamar, dándome a escoger entre venir cabalgando o atada dentro de un saco. (Min, explicando su estancia en Tar Valon)

Mientras seas consciente de que te lo merecías, no te lo mereces. A veces pienso que fueron sentencias como estas más que otra cosa las que dieron lugar al título de Zahorí. Bueno, aquí tienes otra. Rómpete la crisma y yo me encargaré de curarla ara poder rompértela de nuevo. (Nynaeve a Egwene, quien había cometido una imprudencia)

-¡Qué el Oscuro se quede con el cuerno por lo que a mí respecta! ¿Qué me importa encontrar el Cuerno si abandono a Egwene a su suerte? Si hiciera eso, el Cuerno no podría salvarme. El Creador no podría salvarme. Me condenaría yo mismo. (Rand, cuando le sugieren escapar con el Cuerno)

-Tenía una curiosa sensación en la cabeza, como si estuvieran en peligro fragmentos de su vida. Egwene era uno de ellos, un hilo de cuerda que componía su vida, pero había otros sobre los que también sentía pesar una amenaza. Allí mismo, en Falme. Y si una de esas hebras era destruida, su vida nunca sería plena, no del modo como debería serlo. Aún sin comprenderlo, lo sentía con claridad y certeza. (Reflexiones de Rand)