Fahrenheit 451 – Ray Bradbury (Traducción de Francisco Abelenda)
Autoconclusivo
Minotauro, 265 páginas, 8.50 €
9788445071168
“Fahrenheit 451. La temperatura a la que el papel se enciende y arde. Como 1984 de George Orwell, como Un mundo feliz de Aldous Huxley, Fahrenheit 451 describe una civilización occidental esclavizada por los media, los tranquilizantes y el conformismo.
La visión de Bradbury es asombrosamente profética: las pantallas de televisión ocupan paredes y exhiben folletines interactivos, unos auriculares transmiten a todas horas una insípida corriente de música y noticias, en las avenidas los coches corren a 150 kilómetros por hora persiguiendo a peatones; y el cuerpo de bomberos, auxiliados por el Sabueso Mecánico, rastrea y elimina a los disidentes que conservan y leen libros."
Llevo
varios días pensando que contaros de este libro. Uno de los grandes clásicos de la distopía, un
libro de clara referencia para todo el género y todas las distopías actuales. Y
ya que estoy familiarizada con lo actual, pensé que sería buena idea leer la base de la
misma. No sé que quería encontrar en este libro pero, a pesar de que me ha
gustado, siento que no ha llenado del todo el vacío de expectativas que tenía
puesto en él.
De
las cosas que más me han llamado la atención ha sido el mundo futuro en que
Bradbury nos sumerge. Sí que es cierto que, para mi gusto, me ha dado pocos
datos sobre el mismo, en tanto en cuanto cómo ha llegado la humanidad hasta ese
punto. Pero, por otro lado, puesto que se trata de un libro que no llega a las
trescientas páginas, bueno, entiendo que no todo puede tener tanta profundidad
y estar tan desarrollado. Como ambientación, creo que funciona bien. Me
ha gustado mucho el concepto de bomberos como creadores de fuego en lugar de
sofocarlos.
Básicamente este ha sido mi problema con el libro: sé que tiene muy pocas páginas, pero para mi gusto, tiene muy poca profundidad, en todos los aspectos que no son la ambientación. En
esta tónica el libro me ha parecido algo irregular en cuanto a ritmo. El
principio, ya sea por ajustarme al estilo del autor, o sencillamente por mi impresión, se me hizo bastante lento. Para el número de páginas yo diría que me costó bastante engancharme e interesarme por la
historia que me estaban contando. Pero, a partir de ahí, me da la impresión de
que todo se desarrolla muy rápido. De ahí el desequilibrio. Como si el libro tuviera una introducción muy
larga con respecto al nudo y el desenlace en sí.
De
esta forma, mucha de la evolución de los personajes se me ha hecho apresurada, y algunos giros de la trama, me han resultado muy repentinos. Bradbury
me ha dado la sensación de ser un profesor que explica demasiado rápido la
lección y hace que sea muy complicado que el alumno disfrute con la lección.
Puede entenderla, y seguirle a trompicones, pero de ahí a verdaderamente disfrutar
con ello hay un paso. Y es exactamente lo que me ha pasado a mí.
Apenas
he conseguido empatizar o preocuparme por los personajes, excepto tal vez con
Clarisse, quién me ha despertado mucha ternura y recordado mucho a Auri. Siento repetirme pero mis problemas
con el libro son el mismo en todos los aspectos: al ser tan corto e introductorio, apenas noto verdadero desarrollo en trama y personajes. Así
pues, aunque me ha interesado lo que me cuentan sobre los personajes, ellos no
han conseguido interesarme como personas más allá de que me de pena o rabia su
situación.
Creo
que parte de mi fallo es haber ido con la idea de que sería muy similar a 1984
y para mi gusto Fahrenheit 451 propone unas ideas que apenas son expuestas y no
se profundiza en ellas. Supongo que la idea es que sea el lector el que tome
esas ideas y las analice, pero es una idea que no me ha cuajado mucho con el
libro porque esperaba otra cosa.
El
final ha seguido para mi gusto en la misma tónica. Demasiado abierto, demasiado
intuitivo y poco “concreto” por decirlo de alguna forma.
También
he notado que, justo nada más terminar el libro, me había dejado mejor
impresión que el poso meditado sobre el que escribo ahora. Una vez rumiado y pensándolo
desde la distancia y con perspectiva veo que efectivamente ha sido una lectura
agradable, pero nada del otro mundo. Tal vez porque estuviera esperando otra
cosa, tal vez porque este acostumbrada a leer libros mucho más voluminosos, pero
este un libro que definitivamente se me ha hecho corto y me ha sabido a poco.
Aunque
la idea, trasfondo y mundo de Fahrenheit 451 me han gustado y cautivado
muchísimo, me ha resultado un libro muy desequilibrado. Con una introducción
que se me ha hecho muy larga y lenta, ha desembocado en un nudo y desenlace muy
rápidos y superficiales. La sensación general que me ha dejado es que la de un
gran boceto gigante en el cual tienen lugar unos sucesos muy apresurados. Me ha
gustado, porque el trasfondo y la historia son buenos, pero la forma en que
está contado me ha dejado bastante fría. Me resultó complicado seguir la
historia ya que me dio la impresión de que, tras el comienzo, todo sucedía muy
rápido y casi sin tiempo a haber una verdadera causa efecto sino una serie de
sucesos. A grandes rasgos, una novela de la que esperaba otra cosa y que de
desarrollarse los eventos de forma diferente, creo que me hubiera gustado
muchísimo más.
Igual que este le pasa lo mismo a 1984, como por ejemplo que no sabes por qué la humanidad llega a ese punto aunque los personajes están mejor desarrollados. Pero el final te deja por los suelos
ResponderEliminarMil besos^^
Me pasó exactamente lo mismo, que me dejó bastante fría. Y el final creo que fue lo que más me decepcionó, me gusta un final abierto cuando tiene sentido pero este fue uno de esos casos en los que más bien no sabía cómo terminar la historia... De las distopías clásicas esta es la que menos me ha gustado.
ResponderEliminarUn beso!
A mi en cambio me encanta :) la narrativa me parece muy acertada y en general es una gran novela.
ResponderEliminarClasicazo que tengo pendiente!
ResponderEliminarBesotes